En primer lugar Correa diferencia su concepto de socialismo del concepto clásico, no sólo de la concepción marxista sino incluso de los utópicos anteriores, y sostiene que esta nueva interpretación del socialismo, rechaza "la lucha de clases y los análisis simplistas de la evolución de la historia humana", como afirmó en el reciente Foro Social Mundial celebrado en Brasil en enero de este año.

Correa ya se refirió a un socialismo del siglo XXI en su primer discurso de asunción, en enero de 2007, y ha reiterado esa idea en varias oportunidades, pero sin explayarse sobre su contenido.

En enero de 2007, en su discurso de asunción en el Congreso Nacional, se refirió al socialismo del siglo XXI, como "la priorización del ser humano sobre el capital", y atribuyó la paternidad del concepto al presidente venezolano Hugo Chávez.

En otro discurso en octubre de ese año abordó nuevamente el tema al asegurar que en su país se estaba construyendo ese socialismo basado en "una concepción de desarrollo diferente a la del sistema capitalista, donde se busque no vivir mejor, la competencia, tener más cada día, sino vivir bien, satisfacer las necesidades básicas, donde se busque la armonía con la naturaleza, donde se busque la vida indefinida de las culturas". Entonces aseguró que Ecuador se encamina hacia un socialismo del siglo XXI, pero al "estilo ecuatoriano y ojalá haya un socialismo en Venezuela, en Brasil, en Uruguay, en Argentina, en Chile, en Paraguay, porque somos realidades distintas".

En su intervención en el Foro Social Mundial en Brasil que se celebró en Brasil en enero de este año, Correa dió algunas otras pautas sobre el contenido del socialismo del siglo XXI, aunque cuesta diferenciar su propuesta del desarrollismo o populismo de los años 50.

Aprovechando la presencia en ese Foro de otros presidentes latinoamericanos, Correa exhortó a Hugo Chávez, Evo Morales, y Fernando Lugo, a estar en constante cuestionamiento y autocritica respecto a las diferencias existentes entre el socialismo clásico y el socialismo del siglo XXI. Para ello resaltó las mayores diferencias, sosteniendo que "las armas deben ser los votos y los soldados deben ser los ciudadanos y sobre todo rechaza la violencia, la lucha de clases y los análisis simplistas de la evolución de la historia humana".

Además resaltó que el socialismo del siglo XXI es fuertemente humanista, soberano e integracionista.
Admitió que "este proceso lo empezó Chávez solo allá en Venezuela, como el llanero solitario siguiendo el ejemplo de Fidel en la Cuba de la Revolución".

Para Correa el socialismo del siglo XXI implica un mayor papel del Estado en la economía para que en la sociedad se traduzca en bienestar y resolver problemas comunes. "Dentro de esa lógica es necesario además rescatar la planificación en función de un objetivo común".

"Estamos en el continente más desigual del planeta. La ley de la selva (del más fuerte) no puede ser peor en sociedades tan desiguales como la nuestra y no se trata sólo de equidad social sino generacional, de justicia de género para evitar la discriminación contra la mujer en una sociedad machista como la nuestra y la discriminación étnica".

Insistió en la equidad étnica, para que sean los más pobres, los pueblos ancestrales los que sean protegidos. "Hay que acabar con esas formas de explotación ya que el socialismo pone énfasis en la justicia. Hay que ver las realidades de cada sociedad que están en constante evolución y debemos evitar errores y fracasos de antaño", destacó en esa intervención en el Foro Social. Correa enfatizó que este nuevo modelo del socialismo es una nueva concepción de desarrollo, basado en vivir bien, no ser mejor que el otro, "sino vivir en armonía con la naturaleza, con dignidad y equidad, garantizando la supervivencia de las culturas".
"El sistema que ya existe es alternativo al sistema que se está derrumbando, en eso hemos avanzado. Tal vez nos faltó avanzar más y mejor, así estaríamos más preparados para la crisis que nos golpea. Hay que hacer el Banco del Sur y el fondo del Sur". "Empecemos nuestra segunda y definitiva independencia ante esta crisis mundial. Es lo que hemos llamado socialismo ante la crisis del sistema capitalista".