Agrupaciones campesinas y sociales mexicanas alistan movilizaciones de protesta contra la Ley General de Aguas que discute la Cámara de Diputados, por considerarla una legislación privatizadora. La Convención Nacional Indígena calificó como un «acto irracional» que los diputados la aprobaran esta semana en comisiones.
«Es la gota que derramará el vaso, pues es un recurso fundamental para la vida y la producción agropecuaria», afirmó Max Correa.
Max Correa, dirigente de la Central Campesina Cardenista, hizo un llamado a las agrupaciones sociales y campesinas y a la población para unirse en contra de dicha ley.
Alertó que se entregará a empresas privadas el recurso vital para la producción de alimentos y de diversas actividades.
«Los legisladores están provocando un problema social muy serio», acotó.
Por su parte la Asamblea Regional de Afectados Ambientales de Jalisco aseguró que dicha ley es «retroceder a la época de Porfirio Díaz, cuando se entregaron también ríos, recursos naturales a empresas privadas». Miembros de la agrupación dijeron que estará en manos privadas la potabilización del agua.
Marco Antonio Ortiz, de la Coordinadora de Organizaciones Democráticas Urbanas y Campesinas, adelantó que los campesinos no se quedarán con los brazos cruzados. «Saldremos a las carreteras, las ciudades, las calles, recurriremos a foros internacionales, adonde sea necesario hasta que el gobierno entienda que basta de despojos», enfatizó.