Escribe Ricardo Daher.
Las revelaciones del libro "El Silencio" de Horacio Verbitsky (basado en testimonio ante la justicia, entrevistas y otros documentos) confirman la participación de agentes de la la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) de Argentina en Uruguay y con la colaboración de la Armada uruguaya, y es un desmentido al informe que la Armada presentó al presidente Tabaré Vázquez.

La Armada entregó un segundo informe al presidente Tabaré Vázquez sobre su participación en la represión y aunque admite intercambio de información con la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) de Argentina, niega otro tipo de colaboración.

El documento que había sido entregado por el comandante en jefe de la Armada, vicealmirante Tabaré Daners, a la ministra de Defensa, Azucena Berrutti, reconocería que existieron contactos con la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) en Argentina durante la dictadura, aunque éstos se limitaban a un mero intercambio de información. Empero, no se admitiría la participación de agentes encubiertos argentinos en Uruguay, ni la presencia de oficiales uruguayos en territorio del vecino país en operaciones clandestinas de traslado de detenidos políticos. La Armada también negaría su participación en casos de desaparición y en haber incurrido en maltrato y tortura contra prisioneros

Sin embargo, en el libro del periodista Horacio Verbitsky, "El Silencio, de Paulo VI a Bergoglio. Las relaciones secretas de la Iglesia con la ESMA", editado en marzo de este año, se presenta el caso de la detenida por la ESMA Thelma Jara, que demuestra la activa colaboración de las armadas de ambos países en la represión.
Thelma Jara, detenida por la ESMA e incluída en uno de los siniestros planes de "recuperación" fue trasladada a Montevideo por agentes de la ESMA para fraguar un reportaje y desmentir que estuviera detenida. La entrevista realizada en Montevideo fue publicada en News World de Estados Unidos el 22 de agosto de 1979 y posteriormente en varios medios de prensa de Argentina. Posteriormente, el 6 de setiembre, la revista Para Tí, publicó la misma entrevista con fotos en Montevideo de la detenida.

Según la información recogida por Verbitsky, basada en documentos desclasificados del Departamento de Estado norteamericano, entrevistas a Thelma Jara, y testimonios ante la Justicia argentina, los agentes de la ESMA, entre los que se encontraba Ricardo Miguel Cavallo, actualmente detenido en España tras ser extraditado de México donde vivía bajo otra identidad, fueron recibidos en Montevideo por un oficial de la Armada con el seudónimo de Víctor Carrasco, el mismo nombre que usarían para firmar la entrevista.
Según la declaración de Thelma Jara ante el Centro de Estudios Legales y Sociales en 1983, la Armada argentina trajo de Paris de un periodista alemán y otro norteamericano para entrevistarla, y en esos encuentros participó el agente de la Armada uruguaya que fue presentado a los periodistas extranjeros como "un amigo que la protegía".

La embajada norteamericana informó al Departamento de Estado que no existía en Montevideo ningún periodista con el nombre de Víctor Carrasco.

Según el testimonio de Thelma Jara, a fines de 1979 realizó 3 viajes a Montevideo siempre en custodia de la ESMA y con la colaboración de la Armada uruguaya.

Con sólo un poco de curiosidad, leyendo el testimonio de Jara ante el Centro de Estudios Legales y Sociales, y consultando a Ricardo Miguel Cavallo, detenido en España, la Armada uruguaya podría presentar un informe, también mentiroso, pero más ajustado a la verdad.