Escribe Cándido
Un par de sucesos de estos días, los incidentes que siguieron al descubrimiento de dos agentes británicos disfrazados con ropas árabes,fuertemente armados para presumiblemente atentar contra civiles iraquíes, y el robo de 7 mil millones de dólares en el Ministerio de Defensa del gobierno iraquí, revelan la sordidez y descomposición de la "coalición" liderada por Estados Unidos en la guerrra "para democratizar a Irak".
El primero y más grave ocurrió en la ciudad de Basora, donde operan 8.500 soldados británicos, fue difundido por las agencias noticiosas describiéndolo tal como había ocurrido y recogido por alguna prensa que no calibró en el primer momento su gravedad. Rápidamente, en la ampliación de la noticia se intentó matizarlo alterando la versión original.

Según la primera versión la policía iraquí interceptó un automóvil en el que viajaban dos "árabes" que en realidad eran agentes británicos, los que se resistieron, fueron reducidos y llevados a la cárcel local. No pasó mucho tiempo en que tanques británicos derribaran las paredes de la prisión y "liberaran" a sus dos compatriotas. La población del lugar reaccionó prendiendo fuego a dos blindados. Las fotos mostraron a un soldado en llamas saliendo del tanque.

La versión original fue "edulcorada" por los medios que la convirtieron en un "confuso incidente" en el que una "turba" había atacado a los tanques,y en el que dos soldados británicos detenidos habían sido "liberados" por sus compatriotas para "evitar que su vida corriera peligro". Otros medios, por ejemplo el caso de la televisión sueca, preocupados en demostrar que la candidata neoliberal Angie Merkel, había ganado las elecciones en Alemania, pese a que sus propios corresponsales en el lugar informaban lo contrario, o del "éxito histórico de las elecciones en Afganistan" no se "enteraron" del "confuso incidente".

Las autoridades británicas, por boca del impresentable ministro de Exteriores Jack Straw dio su versión de los hechos, mientras el otro gran mentiroso Tony Blair, era puesto una vez más "contra las cuerdas" por la opinión pública que exige otra vez el retiro de las fuerzas estacionadas en Irak. Las relaciones entre los gobiernos de Bagdad y el Reino Unido se han enturbiado notablemente a raíz de estos hechos y el gobernador de Basora, Mohamed al Waili acusó a su "aliado" de "terrorismo internacional". Cuando se escriben estas líneas, miércoles 21, la crisis sigue abierta.

El otro "incidente" fue la desaparición de más de 700 millones dólares del Ministerio de Defensa iraquí en Bagdad. Todo el dinero destinado a equipar al ejército del futuro Irak. Esto ya parece una película tipo Ri fi fi. Ante la lógica pregunta que todos se formulan sobre la autoría del robo algunos maliciosos recuerdan que Rumsfeldt, el ministro de Defensa de Estados Unidos, "estuvo allí" más de una vez en los últimos meses. Ni los más "genéticos antiamericanos" hubieran imaginado tanta debacle militar y moral.