La promesa de transparencia fué hecha en octubre del 2003 y el elemento que marcaba la diferencia entre un gobierno que terminaba abruptamente y uno que comenzaba con mucho ímpetu parecia marcar el fin de la corrupción y el nepotismo en las prefecturas, ministerios, Servicio Nacional de Caminos, Policía, etc.

Ha pasado un año de la salida de Gonzalo Sánchez de Losada y desde que tomó la presidencia Carlos Mesa, la pregunta que debemos hacernos es qué cosas han cambiado.

Hace un año atrás uno de los pilares del conflicto era el tema de sí se exportaba gas y por que puerto, hoy después de un referéndum que se caracterizó por la ambigüedad de sus preguntas que desembocaron en muchas interpretaciones, aún la pregunta sigue siendo la misma, si se exporta o no y por que puerto. Un par de meses atrás vimos al Presidente en una visita a Ilo, en él más puro estilo de Jaime Paz, dando a entender que el gas saldría por el Perú, debido a muchos factores favorables. El día 13 septiembre en un canal de televisión se lo vio a Mesa declarar que técnica y financieramente la mejor opción para exportar el gas es el puerto de Patillos (Chile).

Entonces una vez más se duda de la seriedad de quienes gobiernan, pues por un lado la mejor opción es Chile, pero si así lo hace, baja la popularidad y al parecer es más importante ser popular que obrar correctamente.

En el gobierno de Sánchez de Lozada, la prensa se canso de criticar el nepotismo y el cuoteo, 365 días después continuamos con lo mismo y lo único que cambio es que ahora son otras las familias dentro del ejecutivo. Y en lo referente al cuoteo continua un claro ejemplo en la prefectura de La Paz; en la que adicionalmente ahora se tiene al "cuateo".

La promesa de transparencia fué hecha en octubre del 2003 y el elemento que marcaba la diferencia entre un gobierno que terminaba abruptamente y uno que comenzaba con mucho ímpetu parecia marcar el fin de la corrupción y el nepotismo en las prefecturas, ministerios, Servicio Nacional de Caminos, Policía, etc.

Se criticó mucho y se repudió (con justa razón) cuando Mauricio Balcazar y Sánchez Berzain crearon UNICOM, para controlar la prensa. Hoy gran parte de la prensa esta controlada, hasta parece que no hay noticias y que para que los titulares no sean idénticos recurren a un diccionario de sinónimos.

Ayer Sánchez de Lozada un hombre criticado por su soberbia y autoritarismo, hoy Carlos Mesa soberbio y autoritario, inclusive mucho más que su antecesor, a punto tal de amenazar al legislativo por no hacer las cosas como el quiere.

La Plaza Murillo fue tomada en abril del 2003 por estudiantes del Colegio Ayacucho, a partir de esa fecha tomaron muchos recaudos en la custodia de dicha plaza. Después de la revuelta de octubre, del pasado año, se escuchó que nunca más se cerraría la plaza y que se gobernaría con las puertas abiertas. Ahora, hay días en los cuales el cerco al Palacio de Gobierno por parte de la policía se lo realiza reiteredamente y con mayor rigor donde incluso no puede pasar la prensa.

Que ha cambiado?. Cambio algo del lado de los gobernantes? o es simplemente, que vivimos en un clima algo más tranquilo, por que los bolivianos estamos cansados de los disturbios o nos hemos dado cuenta de que las protestas no sensibilizan a quién esta sentado en la silla presidencial.

Y quienes intentamos ver cambios somos aquellos que creímos que podían darse, los que respaldaron al gobierno cuando sacaron un impuesto de la manga (ITF), los que abucheamos a marchas de protesta.
En conclusión los que creímos (ingenuamente) por un momento que las cosas podían cambiar nos vemos hoy frustrados.

(Tomado de EXPEDIENTE CONFIDENCIAL, Bolivia)