La ministra de Relaciones Exteriores de Suecia, Anna Lindh, murió el jueves 11 de setiembre, trece horas después de ser acuchillada por un hombre en un centro comercial de Estocolmo. El pasado martes, la policía detuvo a un hombre de 35 años, con antecedentes criminales por robo, violencia, alcohol y drogas, desde los 14 años y vínculos con grupos de extrema derecha.

Poco después de las 16 horas del miércoles, Anna Lindh, sin custodia, y acompañada de una amiga visitaba un centro comercial de Estocolmo, cuando un hombre, que los testigos describen como fornido, de 1.85 metros, cabello castaño y tez clara, atacó a la ministra, acentándole varias puñaladas en brazos, vientre, pecho e higado. Ante la pasividad de los testigos, salió caminando, bajó unas escaleras, y sólo comenzó a correr cuando escuchó que alguien gritaba que lo detuvieran. En su carrera abandonó el cuchillo, y su chaqueta con capucha beige, y su gorro de béisbol.

Conducida al hospital, fue operada durante gran parte de la noche, y murió un minuto antes de la 5.30 del jueves. Su asesinato, conmocionó a la sociedad, y despertó los fantasmas surgidos tras el asesinato del primer ministro socialdemócrata, Olof Palme, el 28 de febrero de 1986 y que aún no ha sido aclarado.

Anna Lindh, de 46 años, era la segura sucesora del primer ministro socialdemócrata Göran Persson. Estaba casada y tenía dos hijos. La noche en que fue atacada, debía participar en un debate televisivo defendiendo la adopción de la moneda única europea. Anna Lindh era la principal figura de la campaña del SI. Su muerte cerró anticipadamente la campaña al acordar todos los sectores suspender los debates y actos públicos

¿Atentado político?

Aunque en un principio se manejó la hipótesis de que el atacante habría sido un carterista violento, la versión de que se trate de un atentado político es todavía manejada en varios círculos.

El comunicado de líderes políticos, confirmando la fecha del referéndum sobre el euro, sostenía que la consulta popular debía llevarse a cabo para que la democracia no sea debilitada por la violencia, atribuyendo indirectamente un motivo al agresor. Sin embargo, pocos creen que el ataque haya estado relacionado con el referéndum sobre el euro, aunque los siempre peligrosos neo nazis, hayan optado esta vez por apoyar la opción del NO.

Los comentarios apuntan a destacar el papel de Lindh en las relaciones internacionales, especialmente en la construcción europea y en el nuevo relacionamiento con Estados Unidos.

Aunque Lindh no condujo una posición exterior tan independiente como el asesinado primer ministro, era considera "una chica de Palme". Su gestión estuvo dirigida a la colaboración con Europa más que ha establecer relaciones con los países denominados del Tercer Mundo y algunas de sus posiciones le valieron fuertes críticas desde su propio partido y sectores pacifistas.

En particular fue criticada tanto cuando los bombardeos en Yugoslavia, como por su posición ambigua en relación con el ataque a Irak.

Muy joven se involucró en las campañas estudiantiles contra la guerra de Vietnam, acercándose a al Partido Social Demócrata que conducía Palme. Más tarde, en la década del 80 inició su carrera política como parlamentaria y presidenta la juventud socialdemócrata. Después de la muerte de Palme, fue designada ministra del Medio Ambiente durante el gobierno de Carlsson.

La policía trabajó desde el primer momento con la teoría de que se trató de la acción de un hombre solo, presuntamente un delicuente con antecedentes penales, y descartando casi de plano cualquier vínculo político.

Críticas a la Policía de Seguridad

Desde el asesinato de Palme, la Policía de Seguridad (SÄPO) es la responsable de la seguridad de unos 400 líderes políticos y de gobierno, aunque sólo el primer ministro y el Rey tienen custodia obligatoria. La SÄPO proporciona custodia a pedido o cuando las evaluaciones de la información sugieren algún riesgo.

Al defenderse de las críticas, la SÄPO destaca que no ha existido información que sugieran una amenaza sobre la ex ministra en los últimos meses. De todas maneras admiten que el atentado ha representado un fracaso.

La policía también descartó la vinculación del crimen con el incidente provocado por un borracho durante un acto político por el SI en el que participaba Anna Lindh la semana pasada. Entonces, un hombre alcoholizado con una botella en la mano, se acercó agresivamente hacia el estrado. El incidente fue resuelto sin intervención policial.

Al mismo tiempo se ha proporcionado un número telefónico para recibir información sobre el caso, al tiempo que analiza el cuchillo y la campera abandonados por el agresor. El cuchillo, que habría sido robado poco antes del atentado en otra tienda del mismo centro comercial, fue enviado al exterior para posteriores análisis, ya que los técnicos locales no encontraron huellas.

Por otra parte la policía logró aislar el ADN del sudor encontrado en la gorra abandonada por el atacante, y existe la versión no confirmada, de que también se encontraron manchas de sangre del agresor, herido cuando apuñalaba a la ministra.

Aunque en un principio se manejó que las 55 cámaras de video existentes en el centro comercial no estaban grabando, posteriormente se desmintió esa versión, y ante la falta de pistas concretas, y tras la publicación retocada de fotos del presunto asesino, la policía dio a conocer la fotografía de un hombre que coincide con la descripción de los testigos.

Asimismo, la policía rechazó las críticas por no haber cercado pronto la zona y no haber impedido el tránsito del metro. "No teníamos a quien buscar", fue la respuesta.

Presión sobre la policía

En dos ocasiones durante el primer día tras la muerte de Anna Lindh, el primer ministro Göran Persson, mencionó la necesidad de capturar o al menos identificar al asesino lo más pronto posible. Fue enfático en asegurar que la impunidad en este caso lesionaba la democracia y la credibilidad en las instituciones.
Seguramente, detrás de la demanda de resultados rápidos, está el recuerdo de la larga e infructuosa investigación del asesinato de Olof Palme.

Los jerarcas policiales, reconocieron que existe presión para resolver el crimen, pero aseguraron que trabajan de manera "profesional, igual que cualquier otro crimen".

En la primera conferencia de prensa, el jefe de policía se mostró optimista en cuanto a identificar al agresor, aunque aclaró que puede llevar cierto tiempo. Otra fuente policial hizo trascender en la prensa que el agresor podría tener antecedentes criminales, aunque la revisión de los archivos no proporció ninguna pista concreta.

En la noche del jueves la policía informó que tenía identificado a un presunto sospechoso y que estaba próximo su captura. Se trataba de un hombre de 32 años con antecedentes penales y de violencia con cuchillo, simpatizante neonazi, y que habría sido visto en la zona del crimen. Sin embargo, después se informó que el hombre fue liberado y desvinculado del caso.

Sospechoso sin identificar

Tras la divulgación de la fotografía al público, la policía esperaba obtener algún dato que permitiera su identificación, sin embargo, pese a que se continúa recibiendo información del público, no hay nada concreto.

La policía ha evitado acusar al hombre de la foto por el crimen, pese a que en la fotografía tiene una gorra y una campera como la que describen los testigos, y similar a la hallada en el centro comercial.

En una conferencia de prensa, la jefe de Policía, Carin Götblad, volvió a solicitar la colaboración de la población, tanto para identificar al sospechoso de la foto, como para que aporten cualquier información sobre el caso, sin importar el valor de la misma.

Desde el asesinato de Anna Lindh, el miércoles en la tarde, la policía ha arrestado a sospechosos o personas que respondían al perfil del atacante, pero en lo que va de esta semana, no se han producido nuevas detenciones.

La policía ya ha controlado la fotografía con sus registros, así como en el banco de ADN, sin resultados concretos. Ahora, después de haber asegurado que el atacante era sueco o al menos un delincuente local con antecedentes, el inspector Per-Anders Frithammar, aventura que se podría tratar de un criminal extranjero, y que por eso no aparece en los registros locales. "Es probable que el hombre haya estado aquí ocasionalmente", dijo el vocero policial Lars Grönskog.

Esta hipótesis se contradice con una versión brindada anteriormente, citada por el diario Svenska Dagbladet, en que el atacante habría realizado un intercambio de palabras con la ministra, y hablaba sueco sin acento extranjero.

Los investigadores siguen optimistas en cuanto a resolver el caso, ya que se ha obtenido muchas evidencias en la escena del crimen, imagen del hombre entrando al comercio y que coincide con la descripción del atacante, según testigos, huellas digitales en el pasamanos de la escalera, el arma utilizada, ropa y un gorro del que se ha podido aislar el ADN, pero nada de esto ha conducido a la identificación del asesino. Ahora la policía envió la fotografía a sus colegas en Europa. Además se están controlando las filmaciones de las cámaras de seguridad de los lugares de salida de Suecia, por ejemplo, confirmó la policía, se están revisando las filmaciones de las cámaras de la terminal de barcos hacia Finlandia.

Encuentro casual

De la reconstrucción del crimen, realizada en secreto y con la presencia de varios testigos, la policía tiene la certeza de que el criminal reconoció a la ministra de Relaciones Exteriores, y que no la siguió desde que salió de Cancillería, sino que la encontró de casualidad en el centro comercial. Esta versión está respaldada en que el hombre fue filmado varios minutos antes del ataque, en un piso superior del edificio y cuando Ana Lindh todavía estaba en otro lugar.

"Debido a que todo apunta a que Anna Lindh no fue seguida desde Cancillería, es probable que el hombre se haya encontrado sorpresivamente con ella, se haya decido rápidamente a atacar debido a que ella representaba una sociedad o un sistema que odiaba", sostiene la policía. También descarta que se haya tratado de un ataque para robarle la cartera, "sino le podría haber pasado a cualquiera mucho antes en el mismo lugar", explican.