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Con la abogada Jahel Quiroga |
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escribe Dick Emanuelsson BOGOTA. El acuerdo establecido recientemente entre los paramilitares y el presidente Uribe ha sido rechazado por varios organismos de Derechos Humanos. Jahel Quiroga, dirigente de DD.HH. de Reiniciar e investigadora sobre el genocidio político a la Unión Patriótica que está en proceso en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, califica al gobierno de Álvaro Uribe como un régimen del terror y exige castigo a los paramilitares que cometieron masacres y reparación para los familiares de las víctimas. Al tiempo de exigirle al presidente Álvaro Uribe de que haga un pronunciamiento público diciendo si hay garantías de vida o no para los sobrevivientes de la UP y el Partido Comunista colombiano. La doctora Quiroga subraya, que lo que la población ha vivido en Arauca «es un régimen del terror», desde que Uribe instaló temporalmente su gobierno para en esa región, cuando se realizó esta entrevista. El 15 de julio se firmó el acuerdo entre el representante del gobierno de Álvaro Uribe y nueve de los máximos jefes paramilitares donde plantea que los paramilitares se desmovilizarían totalmente antes el 31 de diciembre del 2005. Pero ¿qué piensa la gente, las organizaciones de derechos humanos que durante décadas han exigido que estos grupos paraestatales fueran disueltos por el Estado que los creó y hizo crecer? Wolmar Said Sepúlveda, alias Oscar es uno de esos jefes paras que operó en Barrancabermeja y acusado de ser el responsable según fuentes oficiales, de 450 asesinatos en Barrancabermeja. ¿Será que él también será amnistiado? En 1991 Jahel Quiroga, abogada y presidenta del CREDHOS, el comité regional de los Derechos Humanos en el municipio de Barrancabermeja y la región de Magdalena Medio, iba ha ser asesinada, pero los sicarios se equivocaron y mataron a su secretaria Blanca Durán. Los autores del atentado eran de La Red de la Marina que asesinaron casi toda la directiva de CREDHOS, más 130 asesinatos según la Defensoría del Pueblo. Diez años después, Barrancabermeja, a pesar de su total militarización y de tener cuatro bases militares, está totalmente copada por los grupos paramilitares, que ahora dicen que se van a integrar a la sociedad civil. Desde 1992 la doctora Quiroga vive como desplazada en Bogotá. Acá sigue siendo una de las personas más amenazadas de Colombia. Pero no se rinde y no se va al exilio. A esta abogada no le asusta nadie. Porque no está dispuesta a clausurar el proyecto que significa reparación y justicia a los casi cuatro mil militantes y dirigentes de la Unión Patriótica, víctimas del exterminio por parte agentes del Estado, militares y paramilitares. La organización Reiniciar, cuya directora es Jahel, ha logrado que la Comisión Interamericana de DD.HH de la OEA en Costa Rica haya asumido el caso del Genocidio político de la Unión Patriótica. ¿Quién más que Jahel Quiroga puede opinar con conocimiento de causa sobre el reciente acuerdo firmado entre el gobierno de Uribe y la cúpula de las AUC, sino ella? Cuando entro en su oficina, ésta está llena de personas desplazadas de un municipio llamado Coyaima, con población indígena y campesina. En la oficina de Jahel se encuentra una ancianita cuya hija y nieto han sido torturados por presuntos paramilitares. Su casa con todas sus pertenencias ha sido quemada el mismo día del anuncio del acuerdo Para-Uribe. La indígena de unos 80 años, con una cara hermosa que no expresa tristeza sino ánimo y resistencia, sólo tiene las ropas que viste. Desde comenzó la campaña electoral del año pasado de Álvaro Uribe, lo que siempre dijo fue de que negociaría y reuniría con los grupos paramilitares. Y así lo ha hecho. En esta oficina hemos recibido quejas y denuncias de muchas familias que huyen de sus parcelas y tierras por que no quisieron hacer campaña por Uribe. Los paramilitares se metieron en las zonas rurales en mayo el año pasado para hacerle la campaña a Uribe. Los paramilitares les decían a la gente que tenían que votar a Uribe Vélez y llegaban diciendo que ellos eran respaldados por él. Eso no lo inventamos nosotros, sino son los testimonios que nosotros en Reiniciar recibimos. Nadie puede votar a un presidente si no es que tiene un acuerdo con ellos. Así lo hicieron y el descaro más grande en este país, es que después salen los paramilitares diciendo que tienen 35% de los diputados en el Congreso. Esto es muy doloroso para nosotros, el hecho de presentar a los paramilitares como independientes del Estado. No, los paramilitares son partes de la estrategia contrainsurgente del Estado. ¿Es como hablar de yo y yo, como alguien dijo? El accionar paramilitar en este país ha sido apoyado por la fuerza pública, es decir por los militares y la policía, incluso por organismos de seguridad e inteligencia del Estado. Los paramilitares viven alrededor del umbral entre de lo rural y lo urbano. Y obviamente, en ese perímetro, en ese umbral, está el ejército o la policía. ¿Ahora que van a hacer? Ahora aun más van a caminar juntos con toda la legalidad. Por que antes se escondieron, mientras la policía o el ejército miraban hacia otro lado cuando los paramilitares mataban a la población civil. Ahora no tienen necesidad de mirar para ningún otro ningún lado. La ONU misma ha señalado acerca de los paramilitares, de que han obrado con la complacencia de la fuerza pública. No de otra forma se explica uno, como no pueden erradicar, someter o capturar a los grupos paramilitares en este país. Por eso, este acuerdo es una burla para nosotros. ¿Por qué se necesitan 36 meses para la desmovilización si ellos no tienen reclamos políticos para negociar ya que se alzaron en armas para defender el Estado contra la insurgencia? ¿Eso despierta sospecha entre Uds.? No hablan sobre los crímenes ejecutados por los futuros desmovilizados. Contra la UP se produjeron muchas masacres atribuidas a los paramilitares. ¿Qué van a hacer con eso? No lo ha dicho el gobierno, que nos hace creer que están negociando con ángeles, estas personas tan buenas que tuvieron que empuñar las armas, vamos a conversar con ellos y dejarlos para que se desmovilicen. . .. ¡Por favor! Incluso no dicen reinserción sino vincularlos, involucrarlos de nuevo. ¿En qué? Los van a recoger entre el ejército y la policía. ¿Y cuál será el papel de ellos ahí? El gobierno de Colombia ha amnistiado más de 500 paramilitares pero ¿donde están? ¿Los ha metido legalmente en la Fuerza Pública, el ejército o en la policía? El señor Restrepo viene con el cuento de que los paras son sediciosos, que solo temporalmente empuñaron las armas contra el Estado pero no con el ánimo de derrocarlo, como es el delito de rebelión. ¡Vea pues! Todo ese cuento jurídico que han inventado para amnistiar a los grupos paramilitares no es más que una decisión perversa del presidente Uribe Vélez! Lo que hace esa gente no es enfrentarse con la guerrilla, sino atacar a la población civil, contra las organizaciones de oposición política como el PCC. Seguridad para los paramilitares Esta cacería de brujas apunta a todos los defensores de los derechos humanos, líderes sindicales o toda la gente que en este momento no puede ejercer sus derechos políticos, y esa es la denuncia que nosotros hacemos internacionalmente. ¿Qué gente se atreve de hacer campaña política por el Partido Comunista si es sujeto de ser asesinada, torturada, desplazada o masacrada? En este país no podemos ejercer los derechos políticos. Y eso debe ser conocido por la ONU o la Comisión Interamericana de DD.HH, que viene en la semana entrante. Esta es la burla que está haciendo el presidente Uribe, que garantizó la seguridad solamente a los paramilitares en su acuerdo ya antes de ser presidente de la República. Los paramilitares que han sacado en sangre y fuego a centenares de miles de campesinos de sus poblaciones, ahora viven tranquilamente en sus casas y trabajan las millones de hectáreas de tierras abandonadas, dice la doctora Quiroga. Jahel Quiroga se dirige hacia una indígena de 80 años que se encuentra en su oficina, que el día antes, el mismo día en que se suscribió el acuerdo entre Uribe y la AUC, tuvo que salir huyendo de su casa en el municipio de Coyaima. Su hija y nieto fueron torturados en un municipio totalmente controlado por el ejército, y la casa, con ropa y pertenencias, fue quemada y una nueva familia sacada de sus raíces y de su hogar. Los supuestos paramilitares actúan en medio de grandes operativos militares. ¿Quién responde por ellos? Por favor, esto hay que denunciarlo internacionalmente. Colombia esta viviendo una crisis humanitaria impresionante, mientras el presidente Uribe está despachando desde el departamento de Arauca (fronterizo con Venezuela). No hay nadie en la calle en Arauca y el presidente está gobernando durante tres días desde la base de la Brigada 18 y las denuncias que están llegando de Arauca dan cuenta de que están pidiendo papeles a toda la población, que es encañonada al grito de: Papeles, la cédula Es el régimen del terror, porque la población civil no va a salir a denunciar al presidente de la República lo que hace el ejército allá. Y si lo hacen, ¿cuáles son las garantías para ellos? La gente no va a salir de sus casas por miedo que el ejército le haga algo. Entonces, ¿qué cree que está haciendo el presidente en Arauca? Claro, que está mandando desde Arauca, porqué Arauca antes se paramilitarizó y él está gobernando desde allá donde están los grupos paramilitares- señala Jahel Quiroga. Masacre de indígenas y condecoración a soldados en Arauca El día anterior a la entrevista con Jahel Quiroga, se dio a conocer a la prensa un comunicado de la Presidencia, mencionando que el general Jorge Enrique Mora y la ministra de Defensa Martha Lucía Ramírez, estaban condecorando a los soldados del Batallón Rafael Navas Talero en el municipio del Tame, departamento del Arauca. Yo sé que cuando uno se va de la casa, lo extraña todo: la mamá, la cama, los hermanos, los amigos, pero esta es una experiencia que a ustedes los va a formar mucho. Tengan toda la disciplina, aprendan todo lo que el Ejército les va a enseñar y sepan que con este servicio militar están cumpliendo con el servicio más importante de sus vidas, afirmó la ministro Ramírez, según el comunicado. Soldados de ese batallón fueron acusados por indígenas de haber asesinado varios dirigentes indígenas y de haber violado a cuatro niñas de 11, 12, 14 y 16 años en el mes de junio. De ese grupo, una joven mujer de 16 años estaba embarazada en el sexto mes y le abrieron el estómago, le sacaron el feto que fue picado a pedazos. Ambos fueron echados al río por sus verdugos. Más de 500 indígenas tuvieron que huir al municipio de Saravena y ocupar pacíficamente la iglesia para salvarse. Ni la prensa, ni la ministra, ni el general Jorge Enrique Mora Rangel comandante de las fuerzas militares mencionaron o criticaron a sus tropas ante las denuncias. En cambio el general Mora Rangel aprovechó ese momento para dar ánimo a las filas castrenses con las siguiente palabras: Yo sé que los muchachos se imaginan una mujer 906090, y no están tan lejos, porque lo que hace Flor del Monte a la moral de las tropas es un trabajo muy especial, que los soldados de mi Patria se merecen por su sacrificio Los paramilitares viven en la estación de policía Jahel Quiroga no está sorprendida por lo sucedido, tampoco por el silencio de la prensa que cubrió los tres días cuando el presidente Alvaro Uribe despachaba desde el departamento de Arauca. Es muy triste que la misma gente de Colombia no tenga el valor de denunciar lo que esta pasando en Arauca y la actuación de la fuerza pública. Reiniciar ha presentado tres informes a la Comisión Interamericana y hemos documentado los casos de que tú hablas. Delante el vicepresidente en febrero este año y el fiscal de la Nación, nosotros entregamos ese informe referido a los soldados que violaron a las mujeres o sobre el puesto de policía en Tame que se volvió un lugar de tortura. También llevamos el informe de la gente y una diputada de Cravo Norte donde los paramilitares viven en la estación de policía, informes que fueron entregados al vicepresidente y el Fiscal de la Nación, Camilo Osorio. ¿Y qué contestaron? Nosotros no estábamos hablando en favor a la insurgencia, por que no es nuestro trabajo, sino observar y documentar las violaciones de los derechos humanos por parte de la fuerza pública y denunciar las infracciones del Derecho Internacional Humanitario (DIH) por parte de la guerrilla y del Estado. No nos metimos en lo de paramilitares por que son parte del Estado. El fiscal en esa ocasión dijo que lo iba a investigar, pero hasta la fecha no conocemos una condena pública. |
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