MONTEVIDEO. Lo dijo claro y fuerte: «vine por dos razones: demostrar su interés en trabajar con Uruguay con la misma intensidad y nivel de apoyo que trabajamos con los países grandes y a revisar el programa económico del gobierno que cuenta con el respaldo del FMI». En esta frase se puede resumir la visita de 24 que el Director Gerente del Fondo Monetario internacional Horst Köhler realizara a Uruguay, de paso hacia la Argentina.

«La economía ha tocado fondo, ya ha comenzado a recuperarse, esperamos que una recuperación intensa en el segundo semestre de este año y un fortalecimiento del crecimiento en el próximo año», dijo Köhler, considerando que el canje de deuda ha sido un aporte importante para el éxito del gobierno en la aplicación y cumplimiento del programa acordado con el organismo. «Uruguay ha demostrado que es un socio viable en la comunidad económica internacional, creó un espacio en Uruguay para definir mejor sus políticas, dando sustentabilidad al crecimiento y poder luchar contra la pobreza», señaló el jerarca al tiempo que encomió al Presidente Batlle y a su Ministro de Economía Atchugarry «por el muy buen trabajo que han desempeñado».

La estadía de 24 horas en el país, sirvió para que el Director Gerente del FMI y los técnicos que lo acompañaron mantuvieran conversaciones también con líderes políticos, Tabaré Vázquez, Julio María Sanguinetti y Luis Alberto Lacalle, con legisladores y con representaciones de la industria y el comercio. En esas reuniones, señaló el jerarca «he visto que no hay lugar para la complacencia, que es importante incrementar las reformas porque esto va a fortalecer el crecimiento» comentó Köhler, al tiempo que subrayó la sorpresa que experimentó ante «el grado de acuerdo que hay en cuanto a cuáles son las esferas que merecen las reformas estructurales».

En ese sentido pasó factura, y dejó en claro que éstas son: incrementar la eficiencia del sector público; continuar la prudencia fiscal; trabajar en la reforma tributaria para tener un sistema impositivo mas sencillo pero mas eficiente, y continuar con las reformas del sector bancario.

Asimismo se declaró también «sorprendido» ante el amplio consenso entre políticos y hombres de negocio en cuanto a la necesidad de definir un concepto de política que llamaría «crecimiento con equidad», entendiendo por tal la protección a los grupos vulnerables, haciendo un esfuerzo por sacar de la pobreza a los muchos niños que están en esa situación, así como dar mas oportunidades a los jóvenes que se van del país, lo que según dijo, es algo que se puede hacer «en este mundo de hoy, globalizado que ofrezca mas oportunidades en una sociedad cada vez mas abierta».

Luego dijo que las condiciones regionales en América Latina han mejorado llegando a «un punto de inflexión gracias la evolución positiva registrada en Brasil, en México, Argentina, Chile y Perú», lo que redundará en beneficio de la sociedad. «El FMI está comprometido con la región, vamos a ayudar, Uruguay es parte de esta región, puede sentirse orgulloso de ello y de que las cosas no estén tan mal en su país», subrayó.

El número 1 del Fondo Monetario reconoció la concentración de la riqueza, en tanto afirmó que cuando analizan los números ven que «la prosperidad se concentra en unos pocos», de ahí la importancia de la «equidad» social de forma que «tienda a ayudar a los pobres para que esto nos de estabilidad política, pues la combinación del buen funcionamiento del mercado con equidad social es fórmula de la paz, la prosperidad y la nueva creatividad».

Consultado sobre que hará el FMI para ayudar a estos países lograr rápidamente esa equidad y mitigar la pobreza, Köhler respondió: «vamos a ayudarlos a corto plazo con hechos prácticos como la asistencia técnica para analizar reformas tributarias y de la administración pública porque nosotros tenemos experiencia en eso», y agregó que el FMI, como parte de la comunidad internacional «abogamos por un más abierto comercio internacional, a favor de un mejor acceso a los mercados del mundo de los productos de Uruguay». Las desigualdades se superan «construyendo un marco que permita directrices al gobierno permita crecimiento económico sustentable», basado en un clima atractivo para la inversión extranjera, que favorezca el gasto social y de mayor equidad a través de «baja inflación, un presupuesto equilibrado, mantener disciplina fiscal, bajas tasas de interés y bajos impuestos».