MONTEVIDEO. Que Venezuela está bajo un hostigamiento -intenso y extenso- por parte de la oligarquía nacional, la que cuenta con el apoyo de los Estados Unidos, no es una novedad. Pese a todo, poco a poco ese pueblo con mucho sacrificio ha logrado salir adelante y mantener su democracia y a su presidente Hugo Chávez. Pero parece que no basta y el gobierno uruguayo en vez de respaldar a un gobierno electo y respaldado seis veces democráticamente, una vez más cumple con el mandato del norte, y comienza a hacer declaraciones intentando poner en duda lo actuado por las autoridades bolivarianas en defensa de su democracia.

El gobierno ve «con preocupación» los atentados registrados en la madrugada del martes en Venezuela contra sedes diplomáticas de Colombia y España, que provocaron cuatro heridos y daños materiales de consideración, dijo el Ministro de Relaciones Exteriores, Didier Opertti, tras su acuerdo semanal con el presidente de la República.

Además, dijo que «por ahora» no se adoptaron medidas especiales de seguridad para la sede diplomática de Uruguay en Caracas. Uruguay sigue la situación venezolana con «particular atención porque ha habido algunas situaciones que tenemos que estudiar cuidadosamente como se han producido, las detenciones que se están llevando a cabo, algunas declaraciones categóricas descartando la acción del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), doctor César Gaviria, comentario que pudiera comprometer la acción futura de la Organización» como mediador en la crisis política venezolana, comentó Opertti.

«De manera que el proceso venezolano lo estamos viendo con preocupación», subrayó. En ese sentido, el canciller confirmó, que «por ahora» no se adoptaron medidas especiales de seguridad para la Embajada de Uruguay en Caracas. «No hemos por el momento tomado medidas, tampoco lo hicimos cuando la situación estuvo, mas complicada. Por tanto manejamos el tema con los controles necesarios pero sin tomar medidas dramática», indicó. Consultado sobre si se mantiene el apoyo del gobierno uruguayo a Hugo Chávez, Opertti aclaró que «no se trata del apoyo a Chávez o a cualquier presidente que nos merecen todos la misma consideración y respeto, lo que nosotros apoyamos es la institucionalidad democrática en Venezuela».

Por otro lado, Opertti reafirmó lo que será la conducta uruguaya en cuanto al ataque bélico a Irak, planteada por el embajador uruguayo Felipe Paolillo en ONU, esperando que sea el Consejo de Seguridad de ese organismo el que determine lo qué hacer. «El único que puede autorizar la guerra es el Consejo de Seguridad» y ésta «tiene que ser una decisión última ya que debe estar precedida de todas las vías posibles, hasta agotarlas, hasta llegar a una solución del tema»; pues «la guerra es el extremo final, supone la mas aterradora de las experiencias». Por eso -agregó- Uruguay defiende el sistema de Naciones Unidas, la competencia del Consejo de Seguridad y la paz».

Sin embargo subrayó que «hay un elemento adicional» porque «el desarme de Irak debe producirse bajo el control de Naciones Unidas», un tema que lleva doce años sin resolverse, dijo. Por último, el doctor Opertti aseveró que «no hay» ningún tipo de presiones sobre el gobierno uruguayo respecto a ese tema.