escribe Dick Emanuelsson

BOGOTA. Ocho policías expertos en contraguerrilla, y cinco más heridos dejó la pasada semana una emboscada del Frente 42 en las cercanías de la capital. Los combates continuaban entre este frente y fuerzas combinadas de la aviación, ejército y la policía. El presidente Uribe Vélez, según CNE, la agencia estatal de noticias, lamentó la muerte de los policías y consideró que la única manera de sacar a la patria adelante es derrotando a los violentos.

El año no comenzó tan bien calculado para el presidente Uribe como había previsto. En su última charla a la nación del año 2002, estaba optimista por el saldo en la guerra contra la insurgencia colombiana. Mencionó, que para el año 2003 el gobierno estaba preparando las negociaciones con los grupos paramilitares en tres partes del territorio nacional. Al mismo tiempo acusaba al Ejército de Liberación Nacional, (ELN), de haber sido jalado en la oreja por las FARC, y en consecuencia de eso esta primera organización se había retirado de las conversaciones con el comisionado por la paz. Con la guerrilla de las FARC solamente se puede iniciar conversaciones a través un tercero, la ONU.

Las FARC a su lado, caracterizó el 6 de enero en un editorial de Resistencia, su órgano central, el gobierno por ser una dictadura uribista y convocó al pueblo colombiano de organizarse para que el nuevo año será de lucha y combate por satisfacer las necesidades, sentires y quereres del pueblo colombiano.

Combates en la nariz de la capital

La emboscada de los 18 contraguerrilleros ocurrió en la mañana del martes 7 de enero, cerca la localidad de Quipile, a 55 kilómetros al oeste de Bogotá. Desde el 22 de diciembre han sido movilizados más de 100.000 militares y policías, prestando servicio a las carreteras en todo el país a raíz de las festividades. El país se ha visto militarizado para evitar cualquier inconveniente. La ministra de Defensa, Martha Lucia Ramírez, en una rueda de prensa, dio un parte victoriosa que ahora terminó en la nariz de la capital con el fatal resultado para las fuerzas militares. La zona por la emboscada es una zona histórica de la guerrilla de las FARC.

Más acciones armadas

En el departamento de Antioquia fueron volados un puente y cuatro torres de alta tensión, presuntamente ejecutado por el ELN. En el departamento de Putumayo fueron dados de baja otros tres militares, por las FARC. En la capital fue incendiado en la noche del lunes 6 un bus del Transmilenio, una nueva comunicación de tránsito colectivo en Bogotá. Tres artefactos fueron colocados en tres buses pero las autoridades lograron a desactivar dos de ellos. El tercer bus fue incendiado con cuantiosos daños económicos.

Las autoridades atribuyeron el hecho a milicias Bolivarianas de las FARC que operan en la capital. Pero ninguna organización se ha responsabilizado el hecho. Es la primera vez que esta forma de comunicación es atacada, presuntamente por guerrilleros.

Guerra psicológica

En marzo del año pasado, las FARC fueron denunciadas por haber atentado contra una válvula de la represa Chingaza, la cual suministra el agua potable para los siete millones de habitantes de Bogotá. En una declaración video filmada, el comandante guerrillero Alfonso Cano desmintió posteriormente la acusación y a su vez acusó a las FF.AA. de ejercer una guerra psicológica contra la población civil. Las FARC no cometen ese tipo de actos terroristas, subrayó el jefe guerrillero.

El 22 de noviembre fueron lanzadas desde el territorio de la Universidad Nacional, dos granadas sofisticadas hacia la Fiscalía General de la Nación. También fue atribuida a la milicia guerrillera, acusación que fue rechazada una semana después por la milicia urbana de las FARC. Como consecuencia de la acción, la universidad fue cerrada hasta que la visita de Colin Powell hubo terminado. En los allanamientos de 3.000 efectivos no se encontraron evidencias para sindicar a la guerrilla como el autor del lanzamiento de las granadas.

Levantan orden de captura a jefes paramilitares

La Fiscalía anuncia que suspenderá órdenes de captura a jefes paramilitares para facilitar negociaciones entre el gobierno y los grupos paramilitares. Si hay una ley que así lo autorice debemos acogernos a ella, aseguró el fiscal encargado, Guillermo Mendoza Diago.

Carlos Castaño, anunció en el mes de noviembre que se iba a entregar a las autoridades norteamericanas para limpiarse de las acusaciones de narcotráfico. Pero ahora, con la decisión del gobierno de Uribe, de comenzar negociaciones con los paramilitares, serán suspendidas las órdenes de extradición contra Carlos Castaño y Salvatore Mancuso.

La posibilidad de suspender las órdenes de captura contra Castaño y Mancuso, máximos jefes de los paramilitares, permitiría que se movilizaran libremente alrededor del país, mientras se llevan a cabo las negociaciones, explicó el fiscal encargado, según el diario El Tiempo del 6 de enero.

Disuelto sueño de Castaño

En un cable de prensa de la agencia de noticias SINPAL (Sistema Informativo Patria Libre), acusa a la V Brigada del ejército, a través del coronel Gustavo Clavijo, comandante de uno de los batallones acantonados en el Sur de Bolívar, por haber dado todo el apoyo al jefe paramilitar Carlos Castaño en esta parte del territorio.

Carlos Castaño colgaría su hamaca en la Serranía de San Lucas y habría arrasado, para ese entonces, lo que llamó el santuario del ELN, escribe SINPAL y continúa: En los últimos tres años murieron asesinados, cobardemente, más de mil pobladores en distintas veredas y caseríos, más de 15.000 fueron forzados a abandonar sus tierras.

Dice el comunicado que Castaño expandió el horror por todos los rincones e intimidó a las comunidades del Sur de Bolívar a fuerza de amenazas y muertes selectivas; fomentó los sembrados de coca, asesinó a los comerciantes que negociaban con la base de cocaína y los remplazó por gente suya; impuso el precio, obligó a los campesinos a que vendieran el producto a sus hombres y les compraran los insumos para el procesamiento.

No tiene propia opinión

El presidente Uribe, que comentó las rupturas de las conversaciones en Cuba entre ELN y el gobierno, dijo en un cable del CNE el 29 de diciembre que El ELN no tiene disculpa. El Gobierno Nacional le ha dado todas las facilidades. Quisiéramos estar avanzando hacia la paz con el ELN pero parece que le hubieran contado a las Farc y que éstos no le hayan dado permiso de avanzar hacia la paz, señaló.

Esta declaración ha sido duramente criticada por los organismos de derechos humanos y personalidades del país como humillante para ELN, cuyas consecuencias cierra todas las puertas por un diálogo con ELN. Decir que ELN obedece a las FARC quiere decir que ha sido tan debilitado militarmente y que ahora no tiene propia opinión. ¡Que tal!, declaró un dirigente de DD.HH.

SINPAL en su informe entrega otra cara de la situación en el campo militar, más preciso en el Sur de Bolívar:

Mil bajas ´paras´ en el Sur de Bolivar

Hoy, el ELN está más fuerte que antes y legitimado por la población que ha sido víctima de la guerra sucia que el establecimiento ejecuta a través de bandas de mercenarios paramilitares en la región.

Castaño ha tenido que pagar un costo alto y lo sigue pagando, al igual que sus socios el Ejército gubernamental y la policía en el Sur de Bolívar. Desde mediados de 1.999 en combates con fuerzas del ELN ha sufrido más de mil bajas, sin incluir las otras con las FARC, concluye SINPAL.

La guerra para el año 2003

El gobierno, según los analistas del conflicto armado en Colombia, tiene que mostrar resultados en el campo militar, y eso rápido para no perder credibilidad ante la opinión pública de terminar con la guerra en Colombia. La política desde el 7 de agosto se llama Seguridad Democratica.

Uribe tiene indudablemente una gran popularidad. Es inteligente, muestra que esta trabajando 20 horas por día y noche. Tiene un control político total, tanto del congreso como del estado. Las Fuerzas Militares ven en Uribe a su hombre.

En el último mes ya no se escucha más que el conflicto es social y armado, como caracterizaba hasta el ex presidente Pastrana y varios conservadores las raíces por los 38 años de guerra en el país. Ahora, desde los batallones, el puestito de policía en el barrio y gran parte de los medios de comunicaciones, solo hablan de la convicción de ganar la guerra y derrotar a los violentos una vez para siempre.

El desafío va desde lo más inmediatista - la posible captura de un mando medio de las FARC o el rescate de un personaje secuestrado - hasta retos más estructurales como mantener el dominio sobre el territorio recuperado - que es su estrategia de fondo - o lograr, como dice el ex consejero de Seguridad, Armando Barrero, reducir de manera efectiva tanto el terrorismo como la capacidad militar de las Farc, escribía El Tiempo el 6 de enero. Para eso se arma el gobierno y las FF.MM. Pero los resultados no están garantizados, agregó el matutino preocupado.

51.400 hombres más

Al terminar este año, según lo presupuestado, deberán estar en la policía 16.400 hombres más, es decir, poco más de un 10 por ciento de los actuales. Mientras tanto en las Fuerzas Militares el aumento previsto es de 35.000, entre regulares, voluntarios y profesionales, casi un 20 por ciento más de los hoy activos, informaba El Tiempo.

En el caso del Ejército, en marzo iniciarán sus labores los 10.000 soldados campesinos que fueron reclutados entre noviembre y diciembre y quienes se encuentran en proceso de formación. Las organizaciones de derechos humanos, desde las colombianas hasta Amnistía Internacional, acusan al gobierno de Uribe por tratar de incorporar a los ahora paramilitares activos en estas escuadrones de soldados campesinos y en efectivo seguir en el monte, pero ahora con aval del estado.

Según la meta del Ministerio de Defensa, para junio de este año, también deberán estar incorporados 10.000 soldados voluntarios y regulares para un total de 30.000. Esta tropa será destinada para cuatro nuevas brigadas móviles.

Y termina El Tiempo:

El éxito de toda la estrategia en el 2003 dependerá, sin duda, de muchos factores. Entre otros, de cómo reaccionen las FARC. Para el analista Armando Borrero, el terrorismo aumentará en la medida en que se urbaniza el conflicto. Y para Carlos Lozano, director del semanario comunista Voz, habrá que ver porque las FARC están rediseñando su estrategia político-militar.

Y mientras tanto, la guerrilla ataca solo 45 minutos de las faldas de Bogota, dejando ocho uniformados profesionales muertos. Si el año 2002 terminó satisfactorio para el presidente Uribe, no comenzó a lo deseable.