escribe LEO

Si usted mira los diarios en alguna de las excelentes bibliotecas municipales de su ciudad, habrá notado, amigo, sin mayor esfuerzo, que la manada (los medios) han empezado a preparar el terreno para la gran cacería que prepara el cowboy de la Casa Blanca como, sorprendentemente lo llama el redactor político jefe del diario sueco Sysdsvenska Dagbladet que se edita en Malmö, al presidente George W.Bush, contra el pueblo iraquí con el pretexto de librarlo de Sadan Hussein. Sadan debe ser eliminado proclama este influyente columnista -tan influyente que los gobernantes acuden a su despacho para ser entrevistados y no al revés como es lo que corresponde-. Y en apoyo de las razones para ello comienza citando unas declaraciones del primer ministro Persson en las que dice que Sadan es un repugnante dictador, con mucha sangre en sus manos, capaz de las mayores atrocidades contra su propio pueblo y contra otros países. Precisamente el mismo día que aparecían estas declaraciones, diarios serios de Estados Unidos revelaban que el ex-presidente Reagan y su vice y ex jefe de la CIA George Bush (el viejo) había apoyado militarmente al dictador iraquí en su larga y cruenta guerra contra Irán, pese a saber que este utilizaba armas químicas, gas mostaza, sarín y otras, contra el enemigo.

Por aquello de que el enemigo de mi enemigo es mi amigo (y por el petróleo, of course). Así que usted estará confundido, amigo sobre los verdaderos destinatarios de la indignada caracterización del primer ministro que cita el diario mencionado. De ahí para adelante el editorialista le endilga al demonio gobernante de Irak, con pruebas o sin ellas, con mucho tiempo condicional -podría estar detrás, sería el inspirador, podría estar en posesión de tales y cuales terribles armas- de cuántas maldades se han perpetrado contra el inocente y democrático país que todos aman incondicionalmente. Esto no es serio, amigo. Es nada menos que una guerra, es decir una cantidad incalculable de víctimas, la mayoría inocentes, lo que está en juego, con el pretexto de echar del poder a un hijo de p. que no es nuestro. Es preocupante que gente lúcida y con formación política, hábil en la defensa de este orden global criminal de la dictadura del mercado, como el columnista del mencionado diario, pierda el control del análisis y haga el ridículo. ¿Acaso es menos cruel que Sadan, el cruzado contra el terrorismo George W.Bush, cuando somete a torturas enloquecedoras a los detenidos en la base de Guantánamo, con la sola y arbitraria presunción de haber delinquido y rechaza cualquier injerencia internacional sobre el tema, como denuncian diversas organizaciones de derechos humanos?

Y luego vienen las acusaciones, directas o indirectas a los gobiernos de Europa que, por una vez dan muestra de sensatez y rechazan o resisten atarse al carro de guerra de Bush. Usted recordará amigo, que cada vez que el sistema capitalista entró en crisis, el asunto desembocó en una guerra, mundial como en el 39 o parcial como la de Corea a principios de los 50. Y la crisis del imperio, es más grave de lo que se dice. Nunca se sabe, amigo. Pero hay que estar preparado para lo peor.