|
||||||
Alfonso Cano desmiente atentado contra el acueducto de Chingaza «La mentira sólo genera la profundización de los odios» |
||||||
escribe Dick Emanuelsson. BOGOTA. En una transmisión de la emisora colombiana RadioNet, el comandante guerrillero de las FARC, Alfonso Cano, responsable político del Secretariado de las FARC, rechaza la acusación oficial de que la guerrilla tuviera algo que ver con el atentado dinamitero del acueducto de Chingaza, que suministra el agua potable para la capital colombiana. Advierte el comandante Cano, que los generales están en la ofen-siva en lo que se podría llamarse una Guerra Virtual, con el pro-pósito de desprestigiar a la insur-gencia con distintos hechos ocu-rridos en el país. En la transmisión, que fue hecha el 28 de marzo, Alfonso Cano dice lo siguiente: Los generales de la república en esta última jornada, están preten-diendo ganar la batalla, que no han podido ganar en el escenario de la confrontación, y ahora tratan de hacerlo a través de los medios de comunicación en una guerra virtual. Por ejemplo, el coman-dante de la 5ª División, señor Fred-dy Padilla, señaló que habían sido las FARC responsable de un aten-tado absurdo contra el acueducto de Chingaza, cosa totalmente ajena a la conducta de las FARC. Igualmente, los generales de la 3ª División señalaron que las FARC habían ocupado el acueducto que lleva el agua a la ciudad de Pasto. Cosa totalmente falsa. Están tratando de crear un ambiente contra las FARC, mani-pulando los servicios básicos, en este caso del agua potable. Y como esto no fuera suficiente, el alcalde de Bogotá, (Antanas Mockus) se inventa un viaje para gastar la plata en Estados Unidos y en Europa para hacer campaña a su favor a costa de las FARC. El líder guerrillero, que en el vi-deo realizado el 28 de marzo en al-guna parte de la montaña colom-biana y distribuido a la prensa acreditada en Colombia, polemiza también contra otros generales de Colombia como el general de la 3ª división, Francisco Pedraza. Nos esta señalando esas terribles masa-cres que está haciendo el paramilita-rismo, que sale de la 3ª división del Ejército y que están cometiendo contra indígenas y campesinos en Corinto (municipio) en el departa-mento del Cauca, que serían obras de las FARC. Toda la población y las organizaciones allá saben que son los paramilitares quienes están sembrando el terror en esta parte del país. Pero es a través de la mentira que los generales tratan de crear lo que llaman los Estados psi-cológicos de las naciones, y así enfrentar la situación de mejor manera, para pedir más plata y para clamar por más ayuda. El domingo pasado (10 de junio 2002), la fiscalía y el jefe de la poli-cía nacional, el general Gilibert, formuló acusaciones vagas contra las FARC por haber utilizado un delincuente como enlace para ma-tar al Monseñor Isaías Duarte Cancino. Este último había denun-ciado a políticos corruptos del de-partamento del Valle, por haber utilizado recursos económicos de los narcotraficantes regionales en sus campañas electorales para el Congreso el 10 de marzo, año en curso. Alfonso Cano rechazó esas acusaciones, formuladas por el ge-neral Pedraza: Al general Pedraza les salimos al paso rápido porque ya nos estaba sindicando el ase-sinato del Monseñor Isaías Duarte Cancino, cuando son los mismos narcotraficantes del Valle que pa-gan en la reunión con el general para acallar la voz del denunciante del obispo de Cali. Son estados de mentira que quieren crear para poder justificar simplemente las nuevas políticas agresivas antipopulares y neolibe-rales contra el pueblo colombiano En estos días también salieron señalando que nosotros éramos enemigos del diálogo y el proceso de conversaciones entre los compañeros del ELN y el gobierno, en absoluto, en absoluto. Todos los refuerzos que tengan como ob-jetivo final llenar de paz y refuerzos democráticos y justicia social, son bienvenidos. Pero de pronto segui-mos peleando para que en Colom-bia la solución sea conversadita política completa a pesar de los enormes enemigos que esa salida tiene en nuestro país. La mentira solo genera la profundización de los odios y distancia en la sociedad colombiana. Nosotros seguiremos con nuestros humildes recursos en la medida en nuestras fuerzas, empujando para que en Colombia haya paz, subrayó el comandante guerrillero de las FARC. |
||||||
|
||||||
|