A la finalización del Seminario de la Mujer Boliviana, María Luisa Tirado destacó el compromiso social asumido en este primer e importante evento que les permitió hablar sobre los riesgos y problemas que encierra esta sociedad: el maltrato físico y psíquico a la mujer, la discriminación por el sexo y por su nacionalidad. «Creo a partir de ahora hemos dejado de ser observadoras pasivas», dijo.

Las participantes a su vez consideran que aún no se ha reivindicado su papel social, por ello en el ejercicio de sus derechos se han fijado tareas de acción inmediata. Sostienen que: «el enriquecimiento social, cultural, da lugar al intercambio de ideas, criterios y valores».

Un apretado resumen de lo planteado, enumera:
1.- La importancia de aprender el idioma como herramienta básica para insertarse en la sociedad y acceder a la información que se necesita para lograrlo. 2.- Es importante que nos adaptemos sin perder nuestra propia identidad y nuestros valores étnicos. 3.- Una manera de integrarse es capacitarse y estudiar, están son las mejores armas que podemos utilizar en contra de la discriminación, a la vez que amplia la posibilidad de integrarse en el mercado laboral obteniendo puestos de importancia que nos ayuden a influir de forma directa en los organismos suecos. Un ejemplo sería los medios de comunicación que hoy cuentan con un gran poder de influencia. 4.- Que nuestros hijos aprendan a comprender nuestra cultura hace también que pueda existir una mejor comunicación y entendimiento entre las distintas generaciones. 5.- Contribuir a la formación de líderes en las nuevas generaciones. 6.- Emprender proyectos en conjunto con organizaciones suecas y trabajar de forma más consiente con los sindicatos y elaborar proyectos para la promoción de la mujer.

El evento en sí constituyó para la comunidad boliviana y latinoamericana una nueva tribuna con identidad propia para abordar vitales problemas que amenazan inclusive a su entorno familiar.