La actual agresión israelí contra la población de Gaza constituye la última fase de una política de limpieza étnica y genocidio contra todo el pueblo palestino desarrollada por el sionismo desde 1948.
Nosotros, latinoamericanos en Suecia, siempre hemos sido y somos firmes enemigos de las expresiones de antisemitismo en el mundo. Esto no tiene que ver sólo con el debate que ha tenido lugar en Suecia y en Europa al respecto, sino con nuestra propia experiencia de haber sido vícitmas del terrorismo de estado de los EE.UU, el que siempre ha contado con el apoyo fiel del estado israelí, aún tratándose de dictaduras antisemitas y nazifascistas como la de Videla en Argentina, Somoza en Nicaragua, Ríos Montt en Guatemala, o de narcogobiernos paramilitares como el de Álvaro Uribe Vélez en Colombia.
Para nosotros, el estado israelí es un enemigo de la paz mundial que debe ser sometido a las leyes del derecho internacional que rigen la convivencia pacífica entre las naciones, y que por ello debe hacerse responsable de los crímenes contra la humanidad cometidos contra el pueblo palestino.
Para empezar, debe obligársele a cumplir con las decenas de resoluciones de las Naciones Unidas y de su Consejo de Seguridad a lo largo de los años, entre ellas la 242 que exige la retirada de Israel a las fronteras de 1967, y la 194 sobre el derecho al retorno de los refugiados palestinos de la guerra de 1948, así como las resoluciones que exigen el desmantelamiento de asentamientos de colonos en los territorios de Cisjordania, Gaza y Jerusalén; las que exigen el fin de la expropiaciones de tierras a palestinos, las que condenan la anexión unilateral de Jerusalén al estado de Israel, etcétera.
Al gobierno de Cuba, que desde el 9 de septiembre de 1973 había cesado sus relaciones diplomáticas con Israel, ahora, en enero de 2009, se le suman la República Boliviariana de Venezuela y Bolivia. Nosotros apoyamos los pasos dados por estos estados latinoamericanos así como las iniciativas tomadas por el actual presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas el nicaragüense Miguel D'Escoto Brockman para lograr una condena internacional de los crímenes perpetrados por Israel en su agresión contra Gaza y el pueblo palestino.
Un sometimiento de Israel a las normas de convivencia entre las naciones es el único primer paso que puede sentar las bases para una solución pacífica del mal denominado "conflicto" en el medio oriente. Sin esto, cualquier tipo de iniciativa encaminada a poner fin a la violencia en la región será pura demagogia.
Apoyamos la resolución adoptada por una mayoria de 142 paises de la Asamblea General den ONU, su órgano más democrático de Naciones Unidas, porque en él están representados sus 192 miembros, sin que ninguno de ellos tenga poder de veto.
Apoyamos todas las medidas de boicot político, económico, cultural y deportivo contra el estado de Israel como medida de presión de la ciudadanía mundial para lograr que dicho país se atenga a la legalidad internacional. En especial, demandamos de la Asociación Sueca de Tenis que suspenda de inmediato el partido de la Copa Davis planificado a tener lugar en Malmö del 6 al 8 de marzo del corriente año.
Deseamos una Palestina en la que musulmanes, judíos, cristianos, creyentes de distintas religiones y ateos puedan vivir juntos y en paz, tal y como ha sido durante los últimos 2000 años.
Aclaración: Este es un pronunciamiento a nombre de los latinoamericanos en Suecia acerca del genocidio israelí contra el pueblo palestino. Les pido hacerlo circular entre todos aquellos compañeros que consideren estén interesados en firmarlo.
El mal llamado "cese al fuego unilateral" de Israel no cambia la esencia de la situación actual. Es más importante que nunca mantener la presión de la opinión mundial contra el estado sionista. En el caso de Suecia, esto incluye el partido de tenis de la Copa Davis entre Suecia e Israel programado para el 6-8 de marzo en Malmö.
Favor contestar antes del 31 de enero con un correo electrónico a [email protected] con el asunto "Pronunciamiento - Palestina". Escribir nombre, organización (opcional) y ciudad.
ronto saldrá una traducción al sueco de este pronunciamiento. Al mismo se pueden también adherir compañeros y compañeras que no sean latinoamericanos y que no residan en Suecia. Esos nombres se especificarán en una lista aparte como adhesiones solidarias.
Solidariamente, Jorge Capelán
|