El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, concluyó la pasada semana una reorganización de su equipo de ministros, con miras a reforzar la actividad del gobierno para enfrentar eventuales escenarios políticos adversos.

Correa ubicó en puestos claves a figuras de su confianza, que trabajaron con él en su campaña electoral del 2006 y atenderán funciones diferentes en el ejecutivo.

Se trata de Ricardo Patiño, actual ministro Coordinador de la Política; Gustavo Larrea, titular Coordinador de la Seguridad Interna y Externa, y Vinicio Alvarado, quien atenderá la información y comunicación con la prensa.

Además, el mandatario posesionó a Fernando Bustamante como titular de Gobierno, pero aclaró que los asuntos políticos estarán en manos de Patiño.

Puntualizó que los desafíos del nuevo encargado del Gobierno serán modernizar a la Policía, encargarse de la seguridad ciudadana y coordinar las acciones que demanden un mejor ordenamiento de tránsito.

El diálogo con la Asamblea Constituyente y demás fuerzas del país estará a cargo de titular Coordinador de la Política.

El retorno de Larrea, ex ministro del Ejecutivo, representa un fortalecimiento de la corriente ideológica de la administración central, debido a la experiencia y contactos de esta figura en el escenario ecuatoriano.

Correa calificó asimismo de prioritaria la seguridad interna y externa del régimen, tras alertar que se avecinan nuevas confrontaciones con la marcha de la Asamblea Constituyente y el proceso de cambio en el país.

El viejo poder que se derrumba prestará resistencia, pues no cederá fácilmente a las transformaciones en beneficio de todos los ecuatorianos, advirtió.

El presidente llamó a la ciudadanía a mantenerse unida y advirtió que hay conspiraciones en marcha para torpedear su proyecto político. Alvarado -actual secretario de la Administración Pública- se encargará de la Comunicación.