escribe Gutemberg Charquero

Coincidiendo con el cuadragésimo aniversario del asesinato del Che Guevara, la copiosa bibliografía sobre su vida se enriquece con la publicación de dos nuevos libros aparecidos, por orden cronológico, en Suecia y Buenos Aires: "Che", del periodista y escritor sueco Björn Kumm (1938) editado por Historiska Media, y "El CHE quiere verte", del argentino Ciro Bustos, (Mendoza 1923), ambos residentes en la ciudad de Malmö, Suecia. Kumm, además de una extensa y honrada trayectoria periodística en su pais, es un auténtico estudioso de los problemas de América Latina, y autor de varios libros, entre ellos, "Terrorismens historia" (1997) y "Kalla kriget" (La guerra fría) 1999. (Su libro sobre el Che será comentado a través de una entrevista en este mismo semanario) Ciro Bustos, que tuvo como temprana vocación la pintura y las artes plásticas en general, no tiene antecedentes literarios lo que no impidió que haya escrito un documentado, dramático e inusualmente ameno testimonio histórico y autobiográfico que tiene, el mérito indiscutible de ser un relato de primera mano.

. No todos lo que participan en una empresa heroica, con todos los ingredientes de entrega, desinterés personal y valor que le adjudican esa calidad, han sido consecuentes con esos principios hasta el fin. Los nombres de los conversos, arrepentidos, desilusionados, son de conocimiento de todos y están ahi, generalmente en las columnas de los grandes medios que encarnan la antítesis de los valores por los cuales el
Che y quienes lo acompañaron en su empresa revolucionaria, perdieron o arriesgaron su vida. Bustos no pertenece a esa especie. Ha vivido con dignidad, una cualidad que el exilio suele poner a prueba, su condición de refugiado político en Suecia, soportando en silencio la derrota sin perder sus convicciones y sobre todo, la acusación falsa y lacerante de haber provocado la prisión y muerte del Che, con la elaboración de unos dibujos retratos de sus compañeros de aventura, realizados en la prisión. El libro, naturalmente ajusta cuentas y pone en claro ese episodio. La descripción del itinerario de su vida no hace de esta el motivo central, sino que es el pretexto para caracterizar el entorno politico argentino y latinoamericano, en el que se inscribe la empresa del Che y sus compañeros. Un entorno diverso pero al mismo tiempo único, como tierra de expolio y sumisión a los imperialismos, británico primero, en los albores de la ruptura de los lazos coloniales con España, y norteamericano después cuando declina aquél, consumada con la estrecha colaboración de las oligarquías que se hicieron con el poder en las nacientes repúblicas.

En ese marco la Revolución Cubana vino a encender, 135 años después de la batalla de Ayacucho que marcó el fin del dominio español, la esperanza de la ansiada segunda independencia. Bustos como tantos millones de hombres y mujeres en el Continente sintió la conmoción del acontecimiento que el 1 de enero de 1959 e intuyó que "una humanidad se había puesto marcha". Y decidió incoporrarse a ella. La historia de esa "marcha" desde su tierra mendocina de verde y vinos, que se inicia con el viaje a La Habana, el encuentro con el Che, la guerrilla dirigida por Jorge Masetti en la selva de Salta, Argentina, hasta el trágico final en Bolivia, y el exilio del autor a una tierra que talvez nunca estuvo imaginada en el itinerario de su vida, está descrita en el libro con mirada comprometida pero crítica. Lo que, naturalmente puede ser motivo de controversia.

La personalidad del Che, por la que Bustos no oculta su admiración pero sin caer en el culto, se realza en el libro. Y se proyecta hasta nuestros días cuando tanta falta hace su integridad moral, su claridad poltíca, contrastándola con las elites "dirigentes" del modelo depredador que masacra el planeta y todos los seres vivos que lo habitan, en su demencial carrera hacia el abismo. Y no puede dejar de pensarse que la semilla que sembraron y regaron con su sangre aquellos abanderados de la utopía, está germinando, con la diversidad que siempre caracterizó al continente latinoamericano, en los procesos que se desarrollan actualmente.