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Johan Ehrenberg y Camilla Sköld Jansson critican política económica de la derecha |
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Johan Ehrenberg, editor de la revista ETC y autor de varios libros sobre economía y Camilla Sköld Jansson, vice presidente del Partido de Izquierda (vp) en una reciente entrevista sostienen que pese a que la economía sueca vive uno de sus momentos de mayor expansión, el gobierno de la derecha encabezado por Fredrik Reinfeldt, está desmontando aceleradamente el bienestar social del país. Como nunca antes las empresas suecas están obteniendo gigantescas ganancias, en tanto que las diferencias entre ricos y pobres de profundizan. Los cambios neoliberales introducidos se están produciendo a una gran velocidad. El gobierno reduce los seguros de desocupación al mismo tiempo que rebaja impuestos a los ricos. No tiene por qué ser así, existen otras alternativas, sostienen Ehrenberg y Sköld Jansson. -Lo que verdaderamente redistribuye socialmente más y de manera efectiva reduce la diferencia de ingresos, es un crecimiento en el sector público. Pero ese crecimiento exige tener otra idea sobre los impuestos diferente a la que tiene la derecha. Lo que la derecha ha introducido en el pensamiento de la gente es que los impuestos son malos y que por eso hay que reducirlos, dice Ehrenberg. -Si queremos conservar el sector público en el nivel actual debemos aumentar los impuestos. Si no lo hacemos en la práctica tendremos inefectiblemente una reducción del mismo. Es necesario hoy mismo utilizar el superávit existente para invertir en el sector público, en el medio ambiente, para reforzar los seguros sociales e incluso para aumentar el seguro de desocupación, dice Camilla Sköld Jansson. En 25 años seremos el doble de ricos -En 25 años Suecia será el doble de rica. El Producto Nacional Bruto (PNB) per cápita aumentará por dos. Y yo me pregunto ¿No podría destinarse la mitad de ese aumento al sector público? Mi respuesta es sí. El problema es que en el movimiento obrero se ha aceptado la tesis de la existencia de una deuda pública y de la importancia de que la deben pagar. Sin embargo tal deuda no existe, sino hay un superávit de 500 mil millones de coronas. Cuando los burgueses hablan de economía dicen: tenemos un superávit que es innecesario, tenemos que reducir los impuestos. Cuando los sindicatos hablan de la economía sueca dicen: tenemos una deuda pública y el dinero que nos sobra no nos animamos a usarlo. Incluso el Partido de Izquierda hizo parte antes también de ese razonamiento. Si nosotros no usamos esa ganancia para inversiones en el sector público, los burgueses la utilizarán para financiar la reducción impositiva, dice Ehrenberg. Para Johan Ehrenberg, de que Mona Sahlin diga que debe mantenerse el objetivo de tener superávit, es sólo una táctica para intentar frenar la reducción de impuestos que el gobierno está dispuesto ha seguir profundizando. Sahlin se adhiere a la tesis de que el objetivo del presupuesto general debe ser el de ahorrar para mantener el superávit. -Primero se dijo, entre los socialdemócratas, que se debía ahorrar para no aumentar la deuda pública, ahora se aduce como motivo el envejecimiento de la población sueca. Hay que romper ese mito, porque si la población vive más años, es una razón más para invertir en el sector público y no al contrario, sostiene Camilla Sköld Jansson. Para Ehrenberg con otra política, se podría por ejemplo darle a los empleados comunales 5000 coronas más mensuales. - Los burgueses dicen que la codicia es buena. Si usted es pobre debe luchar por ser rico, dice Ehrenberg. |
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