Uno de los detenidos de la investigación por los crímenes de la Triple A, Juan Ramón Morales, pidió al juez federal Norberto Oyarbide el cierre de la investigación al considerar que la misma está prescripta debido al tiempo transcurrido.

En tanto, el magistrado envió ayer a Cancillería el exhorto que será remitido a España con los recaudos formales del pedido de extradición del ex subcomisario de la Federal Rodolfo Almirón, detenido en ese país.
Por primera vez desde que se reactivó la investigación, uno de los acusados, Juan Ramón Morales, planteó la prescripción de la causa y cuestionó la decisión de Oyarbide de considerar los crímenes de la Triple A como de lesa humanidad, y por lo tanto imprescriptibles.

El acusado, estrecho colaborador y jefe de custodia del ex ministro José López Rega, consideró que como los crímenes investigados son dela década del 70, debido al tiempo transcurrido, los mismos estarían prescriptos.
Las fuentes consultadas informaron que el magistrado ya le corrió vista y pidió la opinión del fiscal Gerardo Di Massi, quien actúa en la causa durante la feria, para que dictamine si los crímenes de la organización están o no prescriptos.

Según los voceros, el planteo tiene pocas chances de prosperar ya que para la fiscalía la declaración como delito de lesa humanidad ha sido correctamente fundada por el juez Oyarbide.
Por otra parte, el magistrado envió a Cancillería el exhorto con los recaudos formales para acelerar la extradición de Almirón, en el cual se adjuntan las pruebas contra el acusado y se describen detalladamente los hechos que se le imputan.

Cancillería tiene tiempo hasta el 6 de febrero para enviar el exhorto a España, según consignaron las fuentes.