Durante tres semanas Liberación presentará textos de poetas provenientes de todo el mundo que del 27 al 29 de mayo se darán cita en Malmö invitados a participar en las Jornadas Internacionales de Poesía, bajo la advocación este año del poeta sueco del amor Lars Wivallius (1605) cuando se recuerdan los 400 años de su muerte.
Tan apetecible como díficil entre los temas universales de la literatura, el erotismo cuenta con cultores al parecer más numerosos en el mundo latino, y con mayor frecuencia entre poetas mujeres que entre poetas hombres. Estas dos diferencias pueden dar lugar a interesantes observaciones, pero también derivar en lugares comunes.
La invitación que hacen las 19ª Jornadas Internacionales de Poesía de Malmö es a sentir el contraste que produce el tema erótico también en la naturaleza propia de los diferentes lenguajes, por lo pronto para constatar que la definición del placer es siempre aproximativa. La palabra ensaya envainar con la imaginación el cuerpo. Ya el lenguaje en sí mismo sensual, intenta prolongar el acto o conjurarlo. El lenguaje se hace espuma, vaho, emanación de la temperatura sexual. Prolonga la actividad de los sentidos: revive la memoria en los dientes y en la lengua, en las colinas de la piel o en las grutas, en los dedos y en el cuenco cambiante de las manos. La memoria del oído: las voces acurrucadas, los monósilabos de aceite que resbalan emolientes, los espasmos, las quejas. El lenguaje vuelve a pintar la impresión en el ojo: el brillo de lo húmedo, de lo erguido, de lo escondido; la visión de los temblores y las formas inusuales del cuerpo, el rostro en éxtasis. ¿Podrá también la palabra incitar el olfato? ¿Hará que la evocación impregne el aire como emanación de olores secretos?
Comparado a la búsqueda del resplandor, el orgasmo conlleva el rayo, pero el erotismo va mucho más lejos, se provee de más tiempo: es contemplación en la ofrenda. Más transgresión que saciedad, más complicidad que cumplimiento, más poesía que crónica./ A.G.
Homero Aridjis
Nació en Contepec, Michoacán, 1940. Poeta, novelista, ensayista, activista de la defensa ambiental y los recursos naturales, sobre todo de la ballena blanca y las mariposas Monarca. Ha publicado una treintena de libros y ha sido traducido a 12 idiomas. Ojos de otro mirar: poesía 1960-2001 recoge su obra poética.
Eróticas
I
Globos el deseo perfora
en la clara dureza de su cuerpo,
delgadeces empujan en su vientre
un temblor que si se agita salta,
ritmos balancean bajo su pecho
viva abundancia que el deseo persigue
con una sombra flaca.
II
Dos llamas que apagan su calor
cuando están más fundidas
y tienen más desolación
cuando parecen más unidas.
II
Dos soplos que convergen
a un día de carne y hueso
y se disuelven en un abrazo
de ceniza y viento.
IV
El fuego al fin
ya tranquilo sobre sus cenizas,
después de consumir
toda la noche el leño.
Yirama Castaño
Poeta y periodista nacida en Colombia en 1964. Ha publicado cuatro poemarios, entre ellos Naufragio de luna y El sueño de la otra.
Sueño del cómplice
Un caballo negro espera.
Aldaba del espejo,
abre ya
la puerta del otro océano.
Trampa que caza el animal equivocado.
Mis piernas ya no son, ¡galopan!
Por fin,
me atrapo
y me dejo.
Arte Poética
Cuando al final se callan las palabras,
un enredo en todo el cuerpo.
El poema ha hurgado las entrañas
Con su mano.
Mara Lee
Nacida en 1973. Adoptada desde Corea. Magister en Literatura. Debutó en el 2000 con KOM. En el 2001 publicó Hennes Vård.
Movías la cabeza hacia abajo, caíste de rodillas ante él y volcándote hacia adelante. Èl veía sólo tus labios. Alzaste la quijada y miraste hacia arriba; había exigencia en tu mirada. Tu petición coincidía con tu respiración; le pedías ayuda. Que te ayude. No tenía que besarte. Ni acariciarte. Sólo llenar tu boca.
*
Partió tu sexo su mirada de medio alcance. Te abrió con los dedos. Temblabas bajo su contacto. La oscuridad se tendió como una venda al rededor de tobillos, muñecas, y sienes. Te pidió estar quieta. Los dedos continuaron desencombrando hacia adentro el camino para su mirada. Con el ojo apretado al exterior del organo intentó percibir tu interior. No vió nada. Humedeciste su ojo.
*
Miró alrededor de si, evitando cuidadosamente el cuerpo blanco. La primera luz del día se deslizaba en su ojo. Recibió agradecido esto. La luz aliviaba lo dolorido, disipando lo turbio. Cuando de nuevo se volvió hacia tí tenía clara su mirada
Ann Smith
Poeta nacida en Suecia en 1930. En los años 60 fue especialmente celebrado su libro Två i stjärnan .
Ni un viento
En la corona del olmo
La mano dibuja de nuevo
La curva de la espina dorsal
los labios encuentran su
nuca desnuda
y aguardan
*
Es tan acariciador el mar hoy
Respira hacia la playa
como tu voz en mí
Ahora saben las peonias que existes
La cabaña blanca en la colina
lo ha visto
Lo sintió el viento
y la sal del mar
Ana Rossetti
Poeta y novelista nacida en Cádiz, España, 1950. Ha publicado entre otros Los devaneos de Erato, Dióscuros, Devocionario.
Concierto
Mira cómo en mi sangre se derrama metálico
el estruendo, mira cómo sacude
las veloces antenas, alacranes mordiendo
mi arena desbordada. Mira cómo es flagelo,
cómo es lengua imperiosa que solivianta y ciñe,
se abre paso, y con húmedo jade,
las ropas empapando, las dibuja y aprieta.
Mira cómo la música es cuchillo
que su vértice hunde, mira cómo en mi cuerpo
es sísmica serpiente mi sangre se desmaya-
mira cómo de mí me desvanezco. Mira cómo.
Hyam Schougair Yared
Nació en Líbano en 1975. Ha publicado Reflets de lune y Blessures de leau .
2.
Reconocer tu lengua en mi desvanecimiento.
3.
No soy de ningún lugar, de ninguna ola,
de ningún otro. Inclinada sobre tu orilla
el agua me bebe entera.
6.
No sé si mi mano me pertenece,
si mi mirada es una prolongación
de la mañana.
Nada sé. Mi cuerpo sabe
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